Y las navidades terminaron...

 

Empezaré la historia por el final: la mañana de Reyes, la ilusión en sus ojos...

 

El comprobar cómo los camellos se han bebido el agua que les dejamos, contar cuántos dulces se han comido los Reyes, leer atentamente la carta manuscrita que nos han dejado y sobre todo sobre todo, ver que Sus Majestades se han acordado de cada cosa que les pedimos, especialmente ese tutú rosa que tanta ilusión le hacía...

un piano negro "como los de verdad"... 

 

Y, entre otras sorpresas, unas zapatillas de ballet que ni siquiera había pedido y que le encantaron...

 

Mi ilusión... pues tan grande como la suya al verla disfrutar vestida de bailarina...

Y al llegar a casa de los abuelos... ¡más regalos! No podía estar más contenta con su bici de mayores, de Hello Kitty...

 

Ni siquiera llegaba a los pedales pero qué más le daba a ella, se sentía pletórica, disfrutando de cada momento. Y no sólo con sus regalos, también ayudó a entregar los de los demás. Este año sí que lo ha vivido de verdad.

 

Pero lleguemos a la noche del 5 de enero: mucho frío y más ilusión en la cabalgata de nuestra localidad. Hasta Tiziana estaba atenta...

 

 

Y Carlota,  feliz cual perdiz

Mientras otros niños se esmeraban en coger caramelos, ella esperaba ansiosa la carroza de los Reyes para mandarles un último saludo.  Y yo volví a vivirlo como una niña...  (no puede darme más pena el suceso de Málaga. Pobre niño y pobre familia... Mis condolencias)

 

Y aún un día antes (apurando, como siempre) fuimos a llevar la carta a Sus Majestades de Oriente

 

Carlota fue directa a Baltasar, su rey preferido -como el mío de peque- 

Le contó todo lo que quería sin tapujos y escuchó lo que el Rey le pedía para el año nuevo

 

Como siempre, el trato se cierra con un beso

 

En general han sido unos días muy intensos, de muchas reuniones familiares y de ponerse guapas a menudo. Aquí las dos vestidas By Niné again

Me como a mi bebé cuando está así, recién bañadita, perfumada y tranquila...

 

Carlota poniéndose colonia... 

... hasta en los zapatos! Pero qué relimpia es mi niña jajajjaa

 

Y sobre todo han sido días de pasar con la familia: mi hermano y mi cuñada me han hecho tía por primera vez, y de un niño requeteprecioso (si me dejan un día os lo enseño, es para babear sin parar) Y mis niñas han disfrutado mucho de sus tíos y abuelos. Aquí con Sara, mi hermana pequeña...

Y aquí abajo con mi hermana Mireya. Nos faltó Jimena que vive literalmente en el otro lado del mundo y no pudo venir. La echamos muchísimo de menos. (¡¡Ella también me dará un/a sobri para verano!!)

Bueno, y salvo momentos de locura, Carlota cada vez se porta mejor con Tiziana...

 

... aunque de vez en cuando le pega unos achuchones que la pobre mía bastante aguanta jajjaja

 

Y me despido por hoy con algunas "tomas falsas" de la sesión que les hice para las tarjetas de Navidad. ¡Vaya par!

 

 

¡Cómo las quiero!

Ahora a esperar un añito para que se vuelvan a repetir estas escenas de ilusión. Para entonces Tiziana tendrá ya casi un año y medio y lo vivirá más conscientemente. Y además tendrán dos primitos con los que jugar. ¡Soy fan absoluta de las familias grandes! Todo se vive mucho más intensamente. 

Espero que vosotros lo hayáis pasado tan bien y hayáis olvidado por unos días los problemas. Sólo por ver la cara de los niños merece la pena, ¿verdad?